
Sinatra me despertó sin estridencia y dejó en el aire una sensación extraña. Me acordé de su paso por el país y a mi papi tanguero mirándolo por “tele” hace tantos años. Escuchando a “la voz” intenté garabatear algo, ni sabía qué. La propia ausencia me tiene vedado, aún no me suelta y sigo cubierto por el gris transido que cierra el grifo de las palabras y no te dice hasta cuando. De reojo miré mi guitarra y supuse que una canción podría abrir un sesgo de inspiración. Además lo mío no es de luminarias, apenas una incursión de cabotaje y poca cosa haría resucitar esta ingrata carencia. Estaba despertando todavía y evoqué Bahía Tristeza, una melodía de playas y soles que compusimos con el viejo Carlos. Me vi en la casa del Gordo donde jugábamos con James Brown o Stheppen Wolf, fueron tardes y noches de encuentros en magníficos vuelos de magia. Ahora, Sheryl Crow me emociona con su country pegajoso y no quería se apagara su show en la pantalla. Recorté mis pensamientos, copié y pegué frases olvidadas que daban vueltas por ahí. Los ojos claros de la cantante me miraban y el diapasón de su viola acústica aceptaba las caricias de sus acordes simples y sin artificios.
“Como si fuera un espejismo vuelvo todo atrás
no importa si es muy tonto o no vale de verdad
voy caminando solo y pensando donde fue
que ayer dejé de ver mis cosas con la misma sed”.
A veces creo que perseguimos imposibles, que hay un globo rojo en cada uno, un enigma por resolver y afuera la vida no baja del tren. Nos metemos en los agujeros más diversos y dibujamos futuros complicados que no suelen llegar con banderas amistosas, ni siquiera con madrugadas blandas.
“Un mes de abril a punto de escapar
Roberto vuelve del hospicio en unos días
Orlando espera un nuevo hijo que ya está
Y tú aguardando mis tardanzas todavía”
Los años se llevan un montón de nosotros y siempre nos ganarán. Aunque apilemos el mundo tras la puerta, ellos entrarán sin permiso donde sea y nos dirán aquí estamos, me debes algo.
“Como si fuera un espejismo vuelvo todo atrás
no importa si es muy tonto o no vale de verdad
voy caminando solo y pensando donde fue
que ayer dejé de ver mis cosas con la misma sed”.
A veces creo que perseguimos imposibles, que hay un globo rojo en cada uno, un enigma por resolver y afuera la vida no baja del tren. Nos metemos en los agujeros más diversos y dibujamos futuros complicados que no suelen llegar con banderas amistosas, ni siquiera con madrugadas blandas.
“Un mes de abril a punto de escapar
Roberto vuelve del hospicio en unos días
Orlando espera un nuevo hijo que ya está
Y tú aguardando mis tardanzas todavía”
Los años se llevan un montón de nosotros y siempre nos ganarán. Aunque apilemos el mundo tras la puerta, ellos entrarán sin permiso donde sea y nos dirán aquí estamos, me debes algo.
Bueno, siento que la melancolía llegó y no se irá temprano. Este regreso no es lo feliz que hubiera deseado, el corazón manda no?, y esto es lo que tengo en mi patio cercado por las hojas (que no están muertas), ellas caen prematuras y sin remedio, en honor a un abril que ya golpea mi ventana, ¿te das cuenta?
“Soy una anécdota de cualquier lugar
Aquí perdido en los delirios más comunes
Bancando sueños que nos lleven más allá
De la torpeza que al final siempre nos une”. (JLR)
“Soy una anécdota de cualquier lugar
Aquí perdido en los delirios más comunes
Bancando sueños que nos lleven más allá
De la torpeza que al final siempre nos une”. (JLR)
compartiendo contigo
ResponderEliminara tu lado silencios
se pone mi palabra
la más dulce,tal
vez,por callada!
♥♥♥besos♥♥♥
Loco, qué lindo lo que escribiste umtimamente en corazon urbano. Hay una fuerza que sale de las tripas loco. No sé qué estara pasando en tu cabeza pero en todo caso, es de lo mejor que lei. Y te propongo que hagamos alguna historieta juntos. asi la vamos armando los dos, de a poquito. Te pinta ?
ResponderEliminarPalu.
Pero todo pasa y pasará , decía neruda en aquel verso del adiós anunciado... todo cual si fuera camino por gastar queda en la quietud de nuestros relojes que aguardan un día para comenzar a girar..
ResponderEliminaresperando que alguien les de cuerda, y sin chillar.
Amigo.. precioso escrito.. particularmente ciertos pasajes me llegaron más...
Que tengas buen fin de semana, felices pascuas.
Mel.-
Me ha encantado la nostalgia que desprende este escrito,lleno de ese sentimiento melancólico que nos arrastra a veces como a esas hojas no muertas y aún expectantes...
ResponderEliminarMuy bello.Un abrazo.
Amiga de Venezuela, lo que ha volado hacia tu tierra han sido alas sinceras que fueron a mezclarse con aquellas que tu echas al cielo cada vez que piensas o que respiras, que es lo mismo para mí. Somos amigos y eso no tiene precio ni comparación con nada, siempre estaremos a mano uno del otro, porque la vida lo ha querido así. Un abrazo enorme.
ResponderEliminarNada está perdído José... sólo falta un poco de organización y un espíritu persuasivo...
ResponderEliminarTe cuento que son las 4.50 am de un sábado y aqui estoy, eterna trasnochadora... te confiezo que me estoy aburriendo ya que esta tierra no me ofrece ningún desafío intelectual... comparo esta realidad, a lo riquísima (humanamente) que es allá, mi vida, en buenos aires (a pesar de las broncas) y la verdad, me pregunto qué carajo estoy haciendo aquí sentada, sola.
Creo que volveré antes de lo previsto, jaja
Tengo una revolución que hacer!
Mariana
Siempre perseguiremos imposibles, y en el momento en que les demos alcance, buscaremos otros motivos, para dejarnos llevar por el corazón.
ResponderEliminarQue inmenso gusto fue, leerle, aun con añoranza, es hermoso ese revuelo de ideas.
Un saludo.
Muchas gracias por tu visita y tu comentario. Me gustó mucho lo que escribiste ^^ ¡tendré que venir más a menudo!
ResponderEliminarUn beso.
Que grande es la alegría de Lorenzo, que usted, con su manera de escribir, tan delicada, disfrute con sus pequeñas historias. Agradecemos muchisimo sus comentarios tan pero tan perfumados de sinceridad.
ResponderEliminar... siento que la melancolía llegó y no se irá temprano hoy...
Saludos sinceros y afectuosos
Mi entrañable amigo: recibir tus palabras, visita y ese sentir, que la soledad íntima se comparte, ha sido un oasis en medio de este desconcierto, de este no esperar lo que es inevitable, pero que siempre nos deja tambaleantes y asombrados.
ResponderEliminarMis palabras para ti son de agradecimiento eterno. En mi tendrás siempre a una amiga , que aunque la distancia física nos separe, jamás la habrá de alma y corazón.
Recibe un abrazo y mi cariño.
Migdalia Mansilla
La melancolía, que no la tristeza, se viene a vivir conmigo más de lo que quisiera. Creo que nos ocurre a los inconformistas, a los que miramos más allá de nuestro ombligo, a los soñadores, a los que no queremos perdernos nada de lo que vale la pena, que es tan poco.
ResponderEliminarLa inspiración viene cuando le da la real gana. Es intermitente y díscola. No espera, ni te avisa, así que tienes que estar al tanto y tentarla para que se manifieste.
Y aunque creas que ella no anduvo por acá, te aseguro que dejó sus huellas en el patio cercano que ves desde tu ventana. ¿Quién crees que hizo caer las hojas a destiempo para acotar su territorio?
Me encantó.
Un abrazo, José Luís.
Amigo santafesino, escribes muy bien. Te confieso que el globo rojo que llevo conmigo, a veces se desinfla un poquito pero la poesía me da aire suficiente para que remonte cierta altura.
ResponderEliminarJosé, leer tus relatos es encontrarse muchas veces navegando dentro de ellos en una participación profunda.
ResponderEliminarEste relato me llevó por los recuerdos.
Abrazos
Elisabet
Anduve por "Corazón Urbano": asombroso -como siempre- lo tuyo y lo de Kela... leerlos es un regocijo para el espíritu .
ResponderEliminarAlicia (Chachi)
Que mas decir, bello! bellisimo, me transporto a traves de un sueño,
ResponderEliminar...“Soy una anécdota de cualquier lugar
Aquí perdido en los delirios más comunes
Bancando sueños que nos lleven más allá
De la torpeza que al final siempre nos une”...
un placer leerlo,
lo saluda,
La U.
La melacolía no siempre se vive de a uno y cuando pasa se recuerda en compñía de un buen jerez o un largo cigarrillo.
ResponderEliminarTe acompaño.
muy bueno Jose
ResponderEliminarno voy a agregar nada a lo que ya esta lleno
saludos!!!
¡Ja!Con todas las lecturas que le debo debería pegarme un tiro en la cabeza, osea que no hay cuidado, yo tampoco me he olvidado de usted, dicho con vergüenza...En fin, lo saqué de unos poemas de Octavio Paz, ese méxicano me encanta...Bueno, las lecturas,según estoy aprendiendo académicamente, son múltiples, felizmente...Simplemente disfrutelas y relealas...Pero no tanto, suerte, chao.
ResponderEliminarLas contradicciones y frágilidades del hombre...Uf...Tema para rato...
ResponderEliminarTodo tu texto me ha encantado, amigo, pero estas palbras me parecen muy inspiradas:
ResponderEliminar"Los años se llevan un montón de nosotros y siempre nos ganarán. Aunque apilemos el mundo tras la puerta, ellos entrarán sin permiso donde sea y nos dirán aquí estamos, me debes algo."
Gracias por tu visita a mi Blog y un fuerte abrazo de mar.
Lola
Hago escala en estas palabras:“Soy una anécdota de cualquier lugar
ResponderEliminarAquí perdido en los delirios más comunes
Bancando sueños que nos lleven más allá
De la torpeza que al final siempre nos une”.
Porque el corazón siempre anuncia más que el intelecto... gracias por tu comentario.
Abrazos
Elisabet
Gracias José. Ese sobrevuelo que hacés por las palabras de otros, son más que bienvenidas. El nombre de tu blog debe de tener que ver con eso. Emn vez de ver la palabra que se instala en sentir. Un abrzo. Mercedes Sáenz
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